Controlar nuestro hogar, oficina o negocio desde cualquier parte del mundo es posible gracias a los sistemas de vigilancia mediante cámaras IP.Éstos sistemas crean una secuencia de imágenes que son transferidas a través de una red de internet, ya sea inalámbrica o de cable, a la que podemos acceder desde cualquier punto que disponga de conexión a internet. La vigilancia IP nos ofrece muchas más ventajas respecto a los sistemas tradicionales, tales como la accesibilidad remota, menores costes de los dispositivos, cámaras, etc. También los costes de la instalación son menores, ya que no necesitan una infraestructura específica, únicamente necesitan una red de internet.
Las cámaras IP llevan incorporado un servidor web, por lo que no es necesario tenerlas conectadas a un ordenador para su funcionamiento. Se conectan directamente a la red domestica de internet o a una red LAN por medio de un cable de red convencional RJ45.
A estos dispositivos se les asigna una dirección IP interna, para acceder a las imágenes de la cámara únicamente debemos teclear esa dirección IP en un navegador de internet desde cualquier parte del mundo, también es posible hacerlo desde un teléfono móvil. Por medio de un software específico tendremos una serie de posibilidades con estas cámaras. Podremos vigilar, escuchar, realizar grabaciones en un disco duro, activar alarmas, control de accesos, etc.
Podemos encontrar cámaras IP desde 100 €, incluyendo recepción de AUDIO, imágenes en color, visión nocturna por infrarrojos, transmisión WIFI, rotación vertical y horizontal, y muchas más opciones dependiendo de los precios. Si tenemos una cámara convencional de video, tenemos una buena opción en el mercado. Un servidor IP, el cual nos convierte nuestra videocámara en un sistema IP de transmisión a través de internet.